miércoles, 18 de abril de 2018

Debes pensar que soy una tonta

A veces me pregunto qué piensas de mi.
Si sólo soy una tonta que se sienta cada noche a ver nuestras fotos, si sólo sé añorar el pasado. Extrañarnos a nosotras en presente perfecto, y pensarnos en presente progresivo.
Contar cada segundo que paso sin verte, hablarte a cada instante porque no sé estar sin ti.
Y me sigo preguntando qué piensas de mi.
Debes pensar que soy una tonta que muere por abrazarte. Que me importa demasiado lo que sientes, que muero por estar contigo en la misma casa, que me digas buenas noches al oido todos los días.
Realmente debes pensar que soy una tonta, que sólo piensa en amarte mientras hay cosas más importantes.

Aceptancia

Aceptar que tenía miedo a que los demás supieran que se sentía sola, fue el primer paso para dejar de vivir con un amor que no se sentía como amor.

Versos sin besos

A veces pienso que nunca dejaré de medir el tiempo en canciones. Luego recuerdo que me pasó una vez y me da pavor pensar en aquella vez. Quedé devastada entre versos sin besos porque  si besaba más, era posible quedar sin versos. Y yo sin sus versos en mi boca, no podía vivir.

Estrella

Hace dos años y dos meses, decidí ver el sistema planetario desde otro punto de vista. Había estado en una guerra, y las heridas estaban curadas por completo. Me dije a mi misma que merecía la oportunidad de estar con la estrella más bonita. Y lo hice. Cuando la besé, mi boca estalló junto con sus polvos estelares. En ese entonces no sabía que la luz de Estrella iba a brillar en mi vida por más tiempo de lo planeado. Un año pasó y decidimos viajar hasta Plutón, un planeta ya inexistente, porque sólo así podíamos estar solas, sin tormentas solares que llamasen su atención. Han pasado más de dos años intentando que Estrella siga brillando para mi, aunque cada vez es más difícil que una Estrella que lleva billones de años brillando, quiera darme su luz para no apagar la mía.